Aunque se haya generalizado que el llamar trencilla al árbitro de un partido sea por un cordón trenzado que usaban antiguamente los colegiados para tener atado el silbato al cuello, lo cierto es que tiene una versión mucho más lejana en el tiempo.
En los inicios del fútbol, los árbitros iban vestidos con una especie de chaquetilla en cuyos bordes tenían el llamado pasamanería con forma de trenza, y es por esa forma por la que se le conoce como trencilla (tomando la parte por el todo para designar coloquialmente al árbitro).
Para saber más: El Blog de Mayte Carrera
Sevillano, bético y periodista… ¡Menudo cocktail!
No, hombre, es broma. Buena explicación la de los “trencillas” pq, yo al menos, no la conocía.
¡Gracias a ti por pasarte a leer, Nacho! Los cocktails son buenos xD